Hoy en día, en un mundo tan global como en el que vivimos, el aprendizaje de un segundo idioma es fundamental. Además de ser casi imprescindible en muchos trabajos, es una fuente de riqueza en muchos ámbitos: nos permite comunicarnos con un mayor número de personas (principal objetivo), conocer diferentes culturas, entender el propio idioma y cultura desde otro punto de vista, favorecer el desarrollo y salud del cerebro, etc. Es por esto, que cuanto antes empecemos a adquirir un segundo idioma, mejor para nosotros. Por otro lado, todos sabemos que si aprendemos desde la infancia una segunda lengua podemos adquirir un dominio casi total de la misma y con mayor facilidad.

¿Por qué en la infancia somos capaces de aprender un idioma o incluso dos de forma natural?

Los niños y las niñas tienen una gran capacidad de aprendizaje ya que su cerebro se encuentra en un periodo crítico y es mucho más sensible a la adquisición de nuevos conocimientos. Esto quiere decir que durante estos años será simplemente más fácil asimilar un segundo idioma.

Aspectos que influyen en la adquisición de un segundo idioma:

A la hora de aprender un segundo idioma, como por ejemplo el inglés en nuestro colegio, es importante atender a varios aspectos:

  • El niño necesita ser protagonista de ese proceso y participar lo máximo posible.
  • El profesor debe ser flexible y adaptar el proceso al tipo de alumnado que tenga utilizando diferentes materiales, juegos, canciones y actividades.
  • El entorno que rodea al niño es también fundamental ya que va a determinar el tipo de vida fuera del aula y las oportunidades del niño para seguir aprendiendo: amigos, actividades extra-escolares, lo que ven en la tele, tipo de juguetes, etc.
  • El tiempo, ya que cada niño sigue su propio proceso y debemos respetarlo.

Otra ventaja de los alumnos de estas edades es que el miedo al ridículo es menor que cuando somos adultos y esto facilita la expresión oral y la comunicación en lengua inglesa en nuestro caso. Para aprovechar este hecho intentamos que nuestras clases sean principalmente comunicativas y basarlas en actividades lúdicas y juegos.

¿Cómo podemos favorecer el aprendizaje de un segundo idioma?

Para que estos aspectos ayuden al niño a aprender un segundo idioma, los profesores debemos ofrecer el mayor número de oportunidades de practicar con el inglés. En el aula por ejemplo, permitiéndoles que se equivoquen y que ellos mismos se corrijan y vuelvan a intentarlo. Cometer errores es parte del proceso de aprender.

En nuestro colegio durante la clase de inglés utilizamos actividades que implican activamente a los niños. Con los más pequeños por ejemplo, cantar canciones, leer cuentos, y realizar rutinas con expresiones y vocabulario de uso frecuente. Con los mayores, realizamos actividades que imitan situaciones reales de comunicación a través de dinámicas como: show and tell, role-plays, etc.

Además de esto, es importante que las familias también se impliquen.  Fuera del aula podemos darles la oportunidad de leer o ver vídeos o series en inglés, siempre algo que a ellos les motive y no sea forzado. De esta forma, les ayudamos a seguir aprendiendo, pero fuera del colegio y en un ambiente más relajado.

Como ya hemos dicho, el objetivo principal de aprender un segundo idioma es comunicarse y eso es lo que se debe hacer. Las destrezas orales (listening y speaking) son las primeras en ser adquiridas por los niños, y sirven no sólo para empezar a comunicarse sino también para afianzar sus conocimientos de gramática y vocabulario. En resumen y para concluir, ¡demos oportunidades y animemos a nuestros hijos y alumnos a comunicarse en inglés tanto como nos sea posible!

 

Adrián Pascual Vila

Maestro especialista en inglés del colegio Trilema Av. América

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