A lo largo de la historia  maestros, psicólogos, pedagogos y educadores han ido estudiando y divulgando diversas técnicas educativas aunque en este siglo la que más relevancia ha tenido y que hoy por hoy es una de las más reconocidas y utilizadas es la llamada “Refuerzo positivo”.

Pero… ¿en qué consiste el refuerzo positivo?

Pues ni más ni menos que en modificar una conducta ofreciendo al niño un refuerzo en lugar de un castigo; esto es, dar al pequeño un estímulo agradable (cuanto menos material mejor). Cada vez que éste emita una respuesta o acción adecuada, tenderá a repetirla con mayor asiduidad hasta que la tenga perfectamente asimilada.

PAUTAS BÁSICAS:

Las claves para que la técnica del refuerzo positivo se utilice adecuadamente son:
1/ Debe explicarse al niño claramente lo que esperamos que cambie y lo que se le ofrecerá por ello antes de comenzar la técnica.
2/ Las instrucciones deben ser concretas en lo que va a conseguir el niño, en que momento y durante cuánto tiempo para que cambie una actitud por otra. No debe haber negociaciones ni equívocos.
3/ El refuerzo positivo debe ser aplicado a corto plazo especialmente en alumnos de educación infantil; esto quiere decir que hay que dar el estímulo o premio justo después de obtener la conducta deseada.
4/ El refuerzo o estímulo debe ajustarse a la conducta deseada y por lo tanto debe ser coherente y justo.
5/ El refuerzo o estímulo será agradable y motivador para el niño.
6/ Ser constantes; cada vez que el niño realice la conducta esperada se le ofrecerá seguidamente el premio.

Estas estrategias deben ir acompañadas de grandes dosis de cariño. Los niños deben tener claro que no les vamos a dejar de querer porque hayan tenido una conducta inadecuada y así hay que transmitírselo ya que de lo contrario podríamos dañar su seguridad y autoestima.

Para terminar, conviene poner de manifiesto que el objetivo principal de usar refuerzos positivos es contribuir a fomentar actitudes y conductas que son y serán importantes para el desarrollo del niño y para su vida posterior.

Sonia Mas Bosch
Co- tutora 1º Primaria del colegio Trilema Av. América. 

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